domingo, 29 de mayo de 2022

Sirven los probióticos para prevenir la alergia infantil

Sirven los probióticos para prevenir la alergia infantil

A los probióticos se les define como a microorganismos vivos que son administrados al individuo en unas cantidades adecuadas con la que mejorar  la salud de quien lo recibe.

El auge, la moda de su prescripción en la infancia está relacionada con la conocida como la “hipótesis higienista” por la cual la falta de exposición a infecciones a estas edades en las sociedades desarrolladas  influye negativamente sobre el desarrollo del sistema inmunológico del niño pudiendo conducir a defectos del mismo con la aparición de  enfermedades dependientes de ésta al no haber estímulos externos (microbios) y si en cambio o otras sustancias de nuestro entorno inmediato contra las que reaccionamos en forma de “alergias”...

En este sentido, se ha visto como vivir en familias numerosas, en ciertos ambientes rurales, o en presencia de animales de compañía.. pudiera evitar el desarrollo de asma, rinitis alérgica, dermatitis alérgica… dejando la idea de que un exceso de higiene no es del todo saludable, sobre todo en los niños y a determinadas edades. Algo de lo que hablamos hace 5 años (Es Diari 23-12-2016).

Así comentábamos como ciertos hábitos proscritos como chuparse los dedo o comerse las uñas (Lynch SJ et al), aunque exponen al niño con cantidad de microorganismos y a enfermedades (gastrointestinales, parásitos...), pueden tener algún efecto beneficioso en este sentido.  Es la cara y el envés de la inmunidad.

Al aumentar el riesgo a enfermar por infecciones intestinales se aumenta la variedad de la flora intestinal (la microbiota, de la que ha hemos hablado en muchas ocasiones) incrementando  con ello  la inmunidad natural.  La otra cara de la moneda.  Un poco con estos mimbres ha proliferado el afán de ingerir gérmenes que aumenten nuestra inmunidad sin riesgo de infecciones lo que nos lleva  al tema de los probióticos.

Sin embargo, la suplementación de probióticos con el objetivo de modificar la microbiota y mejorar ciertas patologías en los niños pequeños como el cólico del lactante, patología muy frecuente y que desespera a los padres, no han sido hasta ahora satisfactorios (SungV et al), por ejemplo.

Sin embargo, en las enfermedades alérgicas los estudios aleatorizados y controlados en recién nacidos suplementados con un tipo de bacteria el Lactobacillus rhamnosus (LGG) han dado resultados contradictorios en la prevención de estas enfermedades, apuntando que los efectos de éstos sobre las alergias no serían suficientes pues éstas pudieran estar relacionadas, además, con el ambiente que rodea al niño (lactancia materna, por ejemplo…),  por lo que intentando influir solo en la flora intestinal no sería suficiente en este sentido.

En cuanto a efectos secundarios se admite, aún a falta de estudios, que son seguros pues no se han detectado daños en general ni en niños predispuestos (Bafeta A et al).

En este aspecto hoy hablamos de un estudio realizado hace algunos años (2017) que ahora se han actualizado y publicado los resultados. 

Es el Trial of Infant Probiotic Supplementation (TIPS) Study, un estudio realizado en Estados Unidos (EEUU) cuyo objetivo fue determinar si la administración de probióticos durante los primeros 6 meses de vida pudiera influir (reducir) la incidencia acumulada de dermatitis alérgica y asma bronquial en la infancia y en niños predispuestos.

Se trató de un ensayo clínico con suplementación de la bacteria LGG  durante los primeros 6 meses de vida en  92 lactantes  frente a unos niños controles (92) que recibieron placebo, con el  objetivo primario de determinar la incidencia de dermatitis alérgica;  y secundariamente de asma bronquial o rinitis alergica, en niños de alto riesgo de contraer estas enfermedades. 
 Los niños se siguieron hasta el 6 año y en este período de tiempo la incidencia acumulada estimada de de dermatitis fue del  30,9% en el grupo control y del 28,7% en el grupo con suplementos de  LGG, por lo que la tasa de riesgo no fue destacable. 

Al 5 año la incidencia acumulada de asma fue del 17,4% en el grupo control y del 9,7%  en la rama suplementada con LGG , siendo el riesgo tampoco significativo .

Concluyeron que en niños de alto riesgo de alergias,  la suplementación con un probiótico, el  LGG durante los primeros 6 meses de vida, no parecía influir en el desarrollo de ezcema alérgico o de asma bronquial a partir de la edad de 2 años.

Los resultados de estos días abundan más en lo mismo y tienen que ver con la incidencia de estas patologías cuando estos niños han alcanzado los 7 años de edad. Si que se demostró, sorprendentemente, como resultado colateral, que el parto por cesárea estuvo relacionado con mayor incidencia de rinitis.
De ahí, que se apunta que en el tema de las alergias en los niños la  modificación de la microbiota con probióticos no sería suficiente para su prevención, se debería hacer un abordaje más complejo, al ser la causa de éstas en buena medida multifactorial. 

Por ahora no hay nada concluyente. 

Mateu Seguí Díaz
médico de familia 

Seguí Díaz M. Sirven los probióticos para prevenir la alergia infantil Es Diari. 03-05-2022: 33. http://menorca.info/ 

Michael D. Cabana; Madison N. LeCroy; Alicia Menard-Livingston; Caryn R.R. Rodgers; Michelle McKean; Aaron B. Caughey; et al. Effect of Early Infant Probiotic Supplementation on Eczema, Asthma, and Rhinitis at 7 Years of Age. Pediatrics . 2022 Apr 14;e2021052483. doi: 10.1542/peds.2021-052483. Online ahead of print. PMID: 35419605  DOI: 10.1542/peds.2021-052483

Michael D. Cabana, Michelle McKean, Aaron B. Caughey, PhD,d Lawrence Fong,e Susan Lynch, Angela Wong, et al. Early Probiotic Supplementation for Eczema and Asthma Prevention: A Randomized Controlled Trial. Pediatrics. 2017 Sep; 140(3): e20163000.doi: 10.1542/peds.2016-3000.PMCID: PMC5574725 PMID: 28784701

SungV , Hiscock H, Tang MLK, et al. Treating infant colic with the probiotic Lactobacillus reuteri: double blind, placebo controlled randomised trial. BMJ 2014; 348 doi: http://dx.doi.org/10.1136/bmj.g2107 (Published 1 April 2014)

Bafeta A, Koh M, Riveros C, Ravaud P. Harms Reporting in Randomized Controlled Trials of Interventions Aimed at Modifying Microbiota: A Systematic Review. Ann Intern Med. 2018 Aug 21;169(4):240-247. doi: 10.7326/M18-0343. Epub 2018 Jul 17. 

Seguí Díaz M. Los malos hábitos en la infancia y las alergias en la edad adulta. Es Diari. 23-12-2016: 17. http://menorca.info/

 Grabenhenrich LB, Gough H, Reich A, Eckers N, Zepp F, Nitsche O, et al Early-life determinants of asthma from birth to age 20 years: a German birth cohort study.  J. Allergy Clin Immunol. 2014;133:979-988. 

Fall T, Lundholm C, Örtqvist AK, Fall K, Fang F, Hedhammar Å, Kämpe O, et al. Early Exposure to Dogs and Farm Animals and the Risk of Childhood Asthma. JAMA Pediatr. 2015 Nov;169(11):e153219. doi: 10.1001/jamapediatrics. 2015.3219. Epub 2015 Nov 2.

Jhun I1, Phipatanakul W2. Early exposure to dogs and farm animals reduces risk of childhood asthma. Evid Based Med. 2016 Apr;21(2):80. doi: 10.1136/ebmed-2015-110373. Epub 2016 Feb 2.

Lynch SJ, Sears MR, Hancox RJ. Thumb-Sucking, Nail-Biting, and Atopic Sensitization, Asthma, and Hay Fever. Pediatrics. 2016 Aug;138(2). pii: e20160443. doi: 10.1542/peds.2016-0443. Epub 2016 Jul 11.

Seguí Díaz M. Los malos hábitos en la infancia y las alergias en la edad adulta. Es Diari. 23-12-2016: 17. http://menorca.info/ 

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