Los ácidos grasos poliinsaturados omega-3 en el infarto agudo de miocardio
No hace mucho hablamos de una comunicación de la American Heart Association (AHA)-2020 sobre la relación entre la ingesta de ácidos grasos poliinsaturados omega-3 (PUFA 03) y el riesgo de la fibrilación auricular (FA).
Sobre las propiedades sean beneficias o no de la ingesta de PUFA 03 o ácido docosahexaenoico [DHA] hemos hablado en diversas ocasiones y de que la mejor fuente de éstos se encontraría en los pescados, que además del DHA, y del ácido eicosapentaenoico [EPA]), tendrían proteínas, oligoelementos (iodo…).
Como vimos existen datos claros sobre la relación entre el consumo de PUFA 03 con la prevención de la demencia, de la enfermedad de Alzheimer (EA) y de la degeneración macular al actuar sobre la microcirculación coroidal, pues los PUFA 03 estarían en altas concentraciones en la retina, entre otras propiedades…
Estos, según ciertos estudios observacionales los PUFA tendrían efectos antinflamatorias, antiarterioscleróticas y antitrombóticas que influirían en el riesgo cardiovascular (RCV) al tiempo que sobre los triglicéridos (TRIG). En dicho post comentamos como su acción antiarritmica no quedaba claro según el estudio VITamin D and OmegA-3 TriaL (VITAL) presentado como comunicación el noviembre pasado en la AHA-2020.
Durante un seguimiento de 5 años de seguimiento y en más de 25.000 participantes (edad media 67 años, 51% mujeres) no se encontró ninguna diferencia en el riesgo de fibrilación auricular (FA) incidente, fuera persistente o paroxística. Tampoco se documentó, en sentido contrario, un aumento de la frecuencia de la FA como se sugería en el estudio REDUCE-IT (Reduction of Cardiovascular Events with Icosapent Ethyl–Intervention Trial).
El REDUCE-IT a su vez mostró como altas dosis de EPA en pacientes de alto riesgo cardiovascular (RCV) reducía diversos eventos CV (EvCV) fueran eventos isquémicos o muerte cardiovascular (MCV).
En este sentido el estudio aleatorizado pero en abierto JELIS (Japan EPA Lipid Intervention Study) también con dosis altas de EPA mostró beneficios en población de prevención primaria y secundaria. De igual manera, se manifestó el estudio GISSI-P (Gruppo Italiano per lo Studio della Sopravvivenza nell'Infarto Miocardico Prevenzione) que contradecía estudios más antiguos con efectos neutros de éstos PUFA.
En cuanto a su acción en pacientes con arteriosclerosis comprobada como el estudio EVAPORATE (Effect of Vascepa on Progression of Coronary Atherosclerosis in Persons With Elevated Triglycerides on Statin Therapy) mostró efectos beneficiosos sobre la extensión, el volumen y la composición de la placa arteriosclerótica mediante tomografía axial computarizada (TAC).
En este aspecto hemos tenido conocimiento del estudio recientemente publicado por Lazaro et al en el que evaluó el impacto del consumo de PUFA-03 en 944 individuos (edad media 61 años, 209 mujeres) que había sufrido un infarto agudo de miocardio (IAM) con elevación del ST (STEMI).
Para ello se mostró la proporción de la EPA en la fosfatidilcolina (PC) –medida del consumo de EPA en las semanas anteriores- y su relación con el tamaño del IAM y en la prevención de la functión ventricular.
Se investigó si los niveles séricos de PC EPA (consumo de PUFA 03 de origen marino) en el momento del STEMI estaban asociados con una menor incidencia de EvCV, MCV, y readmisiones hospitalarias por causas CV durante un seguimiento de 3 años.
También exploró la asociación entre el ácido alfa-linoleico (ALA, PUFA-03 de origen vegetal) y la mortalidad por cualquier causa y EvCV.
En este seguimiento 211 individuos tuvieron EvCV, de los que 108 fallecieron y 130 fueron readmitidos por causas CV.
Según un modelo de riesgo con cálculo del hazard ratio (HR) se encontró que la PC EPA sérica en el momento de suceder el STEMI estuvo inversamente asociada con la incidencia de EvCV HR 0,76 (IC 95% 0,62 a 0,94) y la readmision por causa CV HR: 0,74 (IC 95% 0,58 a 0,95) por cada incremento en una desviación estandard (DE).
En cuanto a la PC ALA sérica estuvo inversamente relacionada con MCC HR 0,65 (IC 95% 0,44 a 0,96 por cada incremento en una DE).
Concluyen que los niveles elevados de PC EPA en el momento de producirse un STEMI se asocian con un menor riesgo de eventos adversos cardíacos. El consumo de alimentos con estos PUFA como los pescados mejoraría el pronóstico de los STEMI.
American Heart Association (AHA) Scientific Sessions 2020. LBS.01 Presented November 13, 2021.
No hay comentarios:
Publicar un comentario