viernes, 3 de abril de 2020

Conflicto de evidencias en la trasmisión aérea del COVID-19

Conflicto de evidencias en la trasmisión aérea del  COVID-19

No hace mucho nos hicimos eco de un artículo de van Doremalen N et al en el que se evaluó la la estabilidad de los virus SARS (coronavirus, severe acute respiratory syndrome) en diversas situaciones como en aerosoles y en varias superficies durante un período superior a 7 días según condiciones de humedad y de temperatura hospitalarias. Entre el virus SARS-CoV-2 (es el conocido como el virus COVID-19 desde febrero de este año)  y el clásico SARS-CoV-1.
Según éste el  COVID-19 permaneció viable en el aerosol durante la duración del experimento (3 horas) aunque reduciendo su carga de 103,5 a 102  TCID50 por litro de aire, algo parecido al  SARS-CoV-1. Ambos virus tiene una vida media en aerosol parecida (2,7 horas).Ambos virus redujeron sus títulos de manera exponencial con el tiempo según una caída lineal en concentración por litro de aire.

Sin embargo, una reciente comunicación de la OMS plantea dudas sobre la extrapolación de estos datos a las condiciones habituales de los pacientes con este virus, habida cuenta que el estudio se hizo utilizando un nebulizador especial en condiciones controladas de laboratorio que no reproduce la tos humana o los estornudos ni el ambiente habitual del contagio.
La OMS apunta que las evidencias disponibles permiten afirmar que la trasmisión de este virus se hace por el contacto íntimo de gotas respiratorias producidas al toser o por fómites cuando estos alcanzan la nariz, la boca o los ojos de la otra persona,  pero, afirma que no permanece en el aire como aquel estudio demostraba.
La réplica de la OMS se basa en el hecho de que las gotas son demasiado pesadas para mantenerse en el aire cayendo sobre las diversas superficies que rodean a la persona contagiada.
Existen, sin embargo, voces discordantes que  manifiestan que las teorías que se basan en la dicotomia del tamaño de las  gotas, grandes frente a pequeñas desarrolladas a partir del Dr   Carl Flügge (1897) y posteriormente por el Dr William F.Wells (1930), en la época de la lucha contra la tuberculosis y que siguen asumidas por la OMS  y el   Centers for Disease Control and Prevention (CDC) de EEUU para explicar la trasmisión de las enfermedades respiratorias, podría generar inexactitudes. 
Según estos el modelo clásico, de algún modo balístico, diámetro y distancia de las moléculas tras un estornudo o tos no sería del todo exacto pues en realidad se produciría una fase de nube multifásica que llevaría en su interior diversos tipos de gotas con diferentes tamaños, esto haría que su permanencia en el aire fuera mayor según condiciones de temperatura y humedad  y que la distancia pudiera ser mayor del 1-2 metros, que señalan la OMS y el CDC, lo que justificarían las medidas de protección de los sanitarios, señalan.
 Con todo, trabajos de campo realizados en China y Singapur sobre muestras de aire en lugares con pacientes con síntomas debidos al COVID-19 no encontraron rastros genéticos del virus en el aire.
De ahí que la OMS continue recomendando la higiene de manos, la limpieza de superficies, el mantenimiento de las distancias entre las personas (al menos un metro si existe tos o estornudo) y evitar estar en contacto con personas que presenten síntomas (fiebre, tos…) con las que evitar la trasmisión del virus.  

SUBJECT IN FOCUS: COVID-19 virus persistence: Implications for transmission and precaution recommendations 

El coronavirus no se transmite a distancia por el aire, advierte la OMS. La Vanguardia 29-03-2020

Bourouiba L. Turbulent Gas Clouds and Respiratory Pathogen Emissions: Potential Implications for Reducing Transmission of COVID-19. JAMA. 2020 Mar 26. doi: 10.1001/jama.2020.4756. [Epub ahead of print]

 van Doremalen N, Bushmaker T, Morris DH, Holbrook MG, Gamble A, Williamson BN, Tamin A, Harcourt JL, Thornburg NJ, Gerber SI, Lloyd-Smith JO, de Wit E, Munster VJ.  Aerosol and Surface Stability of SARS-CoV-2 as Compared with SARS-CoV-1. N Engl J Med. 2020 Mar 17. doi: 10.1056/NEJMc2004973. [Epub ahead of print] doi: https://doi.org/10.1101/2020.03.09.20033217




1 comentario:

Mateu Seguí Díaz dijo...

Sorprende, por tanto, que los médicos estemos a favor de fumigar las calles, ¿que evidencica existe al respecto?

https://www.elperiodico.com/es/sociedad/20200405/medicos-de-salud-publica-ven-esencial-fumigar-las-calles-contra-el-virus-7918037

El único estudio que nombran es el criticado por la OMS
En un una zona abierta, y sin población como ahora....
Contaminamos el ambiente innecesariamente

mateu